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Es común que acudas a una consulta ginecológica y se te indique un tratamiento con óvulos vaginales. Sobre todo, si se presenta algún tipo de infección. Este medicamento puede parecer un poco intimidante o difícil de colocar, sin embargo, suele ser más sencillo de lo que se piensa.
Continúa leyendo para conocer todo acerca de los óvulos, para qué sirven y cómo se usan, y ante cualquier duda, recuerda consultar con tu especialista.
Los óvulos vaginales son un tipo de medicamento que se compone principalmente por aceite vegetal y otros componentes que ayudan a tratar diferentes problemas de infecciones, así como lesiones. Por lo general, vienen en forma ovalada para facilitar su colocación y se pueden encontrar tanto con o sin aplicador para ayudar a introducirlo dentro de la vagina.
De esta forma, hay óvulos vaginales para tratar síntomas como la irritación, sequedad, prurito, ardor y flujo irregular, ya sean causados por afecciones parasitarias o infecciosas tales como:
Por otra parte, los óvulos también se encuentran destinados para el tratamiento de enfermedades de transmisión sexual (ETS), tales como la clamidia. Asimismo, algunas enfermedades sistémicas también pueden ocasionar síntomas similares y otras complicaciones. Estas son:
Asimismo, los óvulos vaginales se utilizan acorde a cada afección, por lo que deben ser recetados por un especialista. Además, existen otros factores que pueden causar complicaciones que requieran de este tipo de tratamiento.
Estos pueden ser por una mala higiene intima, reacciones alérgicas, uso de productos de higiene inadecuados o que no deban ser colocados en la zona íntima. Igualmente, el uso de medicamentos hormonales y antibióticos o uso previo de óvulos sin indicación médica suelen ser causantes de enfermedades o generar complicaciones en las ya diagnosticadas.
Los óvulos vaginales además de servir para tratar enfermedades vaginales como las anteriormente mencionadas, ya sea por bacterias, hongos o virus, así como lesiones, también se suelen indicar para lo siguiente:
Además, las funciones de los óvulos vaginales son más directas, rápidas y eficaces, ya que van colocados en el área afectada.
Los óvulos vaginales se usan principalmente para el tratamiento de infecciones como ya hemos mencionado. Aun así, podemos encontrar distintos tipos de medicamentos bajo ésta misma presentación. Algunos de estos medicamentos o usos son las siguientes:
Espermicidas: este tipo de óvulo está compuesto por principios activos que se encargan de evitar la actividad de los espermatozoides. De esta forma, impiden que se trasladen hasta las trompas de Falopio y evitando que el ovocito sea fecundado.
Para terapia hormonal sustitutiva: estos óvulos son prescritos para aquellos casos donde exista una deficiencia hormonal específica. Dentro de estos casos se encuentran las generadas durante la post menopausia, así como por ejemplo una falla en función endocrina de los ovarios.
Óvulos para tratamiento complementario: en este caso los óvulos cuentan con componentes como el ácido hialurónico y/o ácido láctico. Asimismo, pueden estar formulados con vitamina E. Este tipo de óvulos ayudan en la cicatrización de heridas, regulación del pH vaginal, así como su hidratación.
Homeopáticos: también existen óvulos a base de medicación homeopática. Estos funcionan como parte de un tratamiento coadyuvante y pueden ser por ejemplo de Caléndula Officinalis.
Como tratamiento de infecciones bacterianas, micóticas o infestaciones parasitarias: estos son los óvulos más conocidos y utilizados, aquellos destinados a tratar las infecciones vaginales.
Independientemente del tipo de tratamiento que tengas con óvulos vaginales, debes estar preparada para realizar su correcta colocación. Generalmente es recomendado su uso durante la noche, antes de ir a dormir. De esta forma, su uso es bastante sencillo, solo debes realizar lo siguiente:
Primero debes tener limpia toda la zona vulvar, utiliza productos especiales para su limpieza, ya que estos cuentan con una formulación que mantiene el pH equilibrado. Recuerda hacerlo desde adelanta hacia atrás, de esta forma se evita contaminar el área con bacterias que se encuentren en la zona anal.
Asimismo, debes tener tus manos bien limpias, sobre todo si los óvulos que te indicó el médico no cuentan con un aplicador, ya que te tocara introducir tus dedos.
En posición boca arriba o decúbito dorsal como también se le conoce vas a colocar las piernas flexionadas tal cual como cuando se realiza una consulta ginecológica. También, puedes colocarte en posición sentada o de pie con una pierna levantada.
Por último, introduce el óvulo por la vagina hasta lo más profundo que puedas, lo ideal es que pueda llegar hasta el cérvix. Si los óvulos vienen con aplicador asegúrate de colocarlo bien para que no se salga antes de introducirlo a lo profundo o para evitar que no se libere.
Su aplicación durante la noche permitirá que este se disuelva uniformemente y no se te salga. Puede que en la mañana tengas un poco de producto, pero es completamente normal.
Como mencionamos anteriormente, es posible que en la mañana al levantarte tengas un flujo abundante, esto no es más que exceso del mismo medicamento. En estos casos, debes tener en cuenta que no se deben usar duchas vaginales. Lo recomendable es solo limpiar la vulva y mientras se completa el tratamiento puedes utilizar protectores diarios mientras el medicamento se mantenga saliendo.
Por otra parte, mientras se usan óvulos vaginales se debe tener un reposo sexual. Es decir, es importante evitar tener relaciones sexuales, ya que solo pueden empeorar la situación, causando irritación, dolor, ardor y hasta sangrado.
Además, dependiendo de la formulación de los óvulos, pueden debilitar el látex de los preservativos lo que puede causar desde un embarazo no deseado hasta infecciones o enfermedades de transmisión sexual.
También debes tener en cuenta que al ser muchas las afecciones que pueden requerir de un tratamiento con óvulos, lo mejor es siempre seguir las indicaciones del ginecólogo. De esta forma, una buena evaluación te garantizará el tratamiento más oportuno para cuidar tu salud íntima.
Además, de acuerdo al diagnóstico, puedes requerir acompañar el tratamiento con otros medicamentos en caso de ser necesario. Por lo tanto, debes evitar automedicarte, ya que esto también podría ocasionar complicaciones médicas o incluso alterar los resultados de exámenes como la citología, biopsia o colposcopia. Los cuales son los principales exámenes para determinar infecciones o enfermedades.
Disclaimer
La información contenida en este blog es revisada por médicos especialistas con la finalidad de brindar un
soporte únicamente informativo. Te aconsejamos consultar con tu médico profesional de confianza en caso de
presentar cualquier síntoma o querer iniciar o suspender algún tratamiento acorde a las condiciones médicas. Los
tópicos contemplados en este contenido no se destinan a tratamientos o diagnósticos. Recomendamos nunca
automedicarse y no nos hacemos responsables por la manera en como utilice esta información.
Sí, durante un tratamiento con óvulos vaginales se debe evitar tener relaciones sexuales. Además, generalmente se suele indicar su colocación a la hora de ir a dormir para que haga efecto durante toda la noche y no se salga ya sea al realizar algún movimiento brusco o fuerza.
Los residuos de los óvulos se suelen eliminar de manera gradual, su tiempo en salir depende del tipo de óvulo que se esté usando. Generalmente, pueden tardar incluso hasta un poco más de una semana.
No, generalmente se recomienda colocarlos cuando no se tiene la menstruación, ya que esto reduce su eficacia. Asimismo, si tienes un tratamiento con óvulos vaginales ya iniciado y llega tu periodo menstrual, lo ideal es suspender la colocación del óvulo hasta que este pase y luego reanudar el tratamiento. Consulta con tu médico en todo momento y sigue las indicaciones que este te diga.